Eres un emprendedor con un nuevo proyecto, manejas las operaciones de una empresa multinacional, tienes una firma de abogados, contadores o incluso arquitectura, o quizás, tu negocio está en las telecomunicaciones o en los servicios de consultoría, sea cual sea tu caso, a la hora de buscar un lugar de trabajo surge una duda: Espacio de Co-Working o Alquilar Oficina, ¿cuál es la opción que más se adapta a ti?
En este artículo analizamos ambas alternativas para que puedas tomar la mejor decisión que te ayude a alcanzar el éxito en tu negocio.
Un espacio de co-working es una alternativa muy popular para emprendedores y freelancers que necesitan un lugar donde poder trabajar y ser más productivos versus trabajar en casa y también tener una imagen corporativa que los respalde a la hora de conseguir clientes.
Los espacios de co-working pueden ir desde un ambiente casual, con áreas equipadas para reuniones informales o esparcimiento como mesas de billar o ping-pong hasta los más corporativos donde se respira un ambiente netamente profesional.
Estos espacios ya vienen listos para ocupar ya que están equipados con múltiples líneas telefónicas, que asignan a cada una de sus oficinas y escritorios, conexión a internet y los implementos básicos que necesita cualquier oficina, como mobiliario.
Otra de las ventajas de este tipo de espacios es que buscan crear una red de contactos entre quienes alquilan, apoyando el emprendimiento, creando oportunidades donde los inquilinospuedan intercambiar experiencias y hacer negocios entre ellos.
Los espacios de co-working son ideales para quienes están comenzando un negocio y todavía no tienen la suficiente estabilidad como para contratar una oficina a mayor plazo y esta, también es una ventaja que este tipo de espacios suele ofrecer; membresías flexibles y contratos a cortos plazos.
Si estás comenzando un emprendimiento, aún necesitas algo más de tiempo para que tu negocio se estabilice o tienes una empresa tipo “lifestyle”, un espacio de co-working puede ser el ideal para ti.
Allí podrás compartir espacio con otras empresas con quienes podrías tener la posibilidad de crecer, más flexibilidad en términos de contratos y acceso a café ilimitado todo el día, listo para servir.
Sin embargo, ten presente que este espacio no es necesariamente más económico que una oficina propia, al menos no cuando tienes un equipo de trabajo en crecimiento que requerirá cada vez más conexiones a internet, líneas telefónicas y espacio físico en la oficina.
“Si no tienes la disciplina entonces co-working probablemente no es la mejor opción para ti. Escoger un lugar para trabajar no debe basarse solamente en el estilo de vida, debe realmente agregar valor a tu negocio de forma monetaria o parecidas” dice Manan Vohra, fundador de Hadean Labs, una empresa consultara basada en Londres y Nueva Deli.
�
En primera instancia, pensar en alquilar una oficina podría parecer como algo complejo y mucho más costoso que un espacio de co-working, sin embargo, no necesariamente esto es así, dependiendo del co-working, los precios podrían alcanzar los miles de dólares al mes, no muy diferente – y quizás superior – al alquiler de una oficina, sobre todo si tenemos un equipo de trabajo mediano o grande que acomodar.
En temas de costos, es cuestión de hacer un simple ejercicio matemático, calculando cuánto nos cuesta alquilar una oficina y cubrir las cuentas de los servicios que necesitamos como internet, electricidad, agua, entre otros y comparar qué nos conviene más.
También vale la pena mencionar que estos espacios podrían estar revendiendo estos servicios, aplicando cargos adicionales sobre las tarifas de los proveedores, en tu oficina, estarías contratando directamente al proveedor, evitando estos costos.
Un punto clave de alquilar oficina propia es la privacidad, sobre todo si trabajas con información delicada que debe mantenerse confidencial, como es el caso de los bufetes de abogados, contadores y firmas consultoras, esta confidencialidad se pone en riesgo cuando compartes espacio con otras empresas y más aún, si están en un espacio abierto.
También en una oficina propia tienes completa flexibilidad para hacer todos los cambios que desees en la decoración y la infraestructura interna de la oficina, como si quieres agregar espacios, como puestos de trabajo, salas de reuniones o incluso espacios para descanso.
Y este último punto no sólo afectará la comodidad de tus empleados o la estética de tu oficina, si no también tu imagen corporativa, ¿qué quieres transmitirles a tus clientes cuando van a tu oficina? ¿Qué han llegado a un genérico donde se encuentran diversas empresas? O, ¿La personalidad de tu empresa?
Y hablando de personalidad, en este tema también entran los empleados que contrates, ya que en un espacio propio tendrías pleno control de a quién contratas y bajo qué proceso lo sometes para que forme parte de tu equipo, en un espacio compartido, también habrá personal común, como la/el recepcionista, la primera cara que ven tus clientes cuando van a visitarte.
Si tu negocio es ya más estable, o incluso si estás emprendiendo y te sientes listo para tomar un compromiso a mayor plazo, alquilar oficina propia podría ser la mejor opción para ti, esto incluso podría ayudarte a transmitir una imagen sólida que inspire confianza a clientes que podrías estar dejando ir al no contar con un espacio propio.